

ATENEO PATRIARCAL DE SAN MARCOS
ATENEO PATRIARCAL DE SAN MARCOS
ATENEO PATRIARCAL DE SAN MARCOS

Nuestro Ateneo
Formar hombres y mujeres profundamente arraigados en la fe ortodoxa, teológica y espiritualmente capaces de servir a la Iglesia con discernimiento, humildad y fidelidad, según la Tradición de la Ortodoxia Eslava.
Nuestro compromiso es ofrecer una educación integral, donde la oración y el estudio vayan de la mano, nutridos de la vida litúrgica, la lectura de las Escrituras y los escritos de los Santos Padres.

Valores
Fidelidad a la Santa Tradición
Creemos que la verdad de la fe está viva en la Tradición de la Iglesia, transmitida por los Apóstoles, sellada en los Concilios y vivida en los monasterios y parroquias.Vida litúrgica y hesicastica
La oración continua, el ayuno, los sacramentos y la espiritualidad monástica son el corazón de nuestra pedagogía.Excelencia teológica con sencillez de espíritu
Buscamos el conocimiento no como vanidad, sino como servicio. Cualquier teología que no conduzca a la humildad es letra muerta.Espíritu de comunión
Nos unimos en torno al altar, la Palabra y la obediencia a la jerarquía canónica y la vida comunitaria.Formación integral
Integramos intelecto, espíritu y acción pastoral para formar servidores integrales de la Iglesia, ya sea en el altar, en la catequesis, en la música sacra o en la misión.

Misión y visión
El Ateneo Patriarcal de San Marcos desea ser un faro de fidelidad ortodoxa en el continente americano, formando una generación de fieles y servidores arraigados en la fe de los Apóstoles, alimentados por la sabiduría de los Santos Padres y despertados a la vigilancia interior y a la oración incesante.

En medio de una sociedad marcada por la superficialidad espiritual, la fragmentación teológica y el olvido de las raíces sagradas, nos proponemos ser un centro de resistencia mística, teológica y pastoral, donde late intensamente el corazón de la Tradición Ortodoxa.
Formamos a clérigos, monjes, catequistas, músicos, iconógrafos y laicos comprometidos que desean vivir su fe con profundidad, integridad y servicio. Cada estudiante está llamado a vivir como discípulo de Cristo Resucitado, a la luz del Evangelio, guiado por la oración de Jesús y la antigua sabiduría de la ortodoxia eslava.
La visión del Ateneo está indisolublemente ligada a la vida de la Iglesia: ninguna formación puede separarse de la Liturgia, del icono, del ayuno, de la comunión de los santos y de la obediencia al Espíritu Santo que habla por boca de los santos Padres.
Nuestro ideal es formar corazones ardientes y mentes iluminadas, capaces de discernir los tiempos, defender la fe con mansedumbre y proclamar, con valentía y humildad, al verdadero Cristo en espíritu y en verdad.
